Los inhaladores son dispositivos médicos utilizados para administrar medicamentos directamente a los pulmones, siendo un método eficaz para el tratamiento de enfermedades respiratorias como el asma y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). En esta guía, exploraremos el manejo y uso adecuado de los inhaladores, proporcionando información valiosa para aquellos que los utilizan o están considerando hacerlo.
Tipos de inhaladores:
Existen diferentes tipos de inhaladores disponibles en el mercado, cada uno con su propio mecanismo de administración de medicamentos. Los inhaladores más comunes incluyen:
- Inhaladores de dosis medidas (MDI): Estos inhaladores liberan una dosis medida de medicamento en forma de aerosol. Requieren una coordinación adecuada para inhalar el medicamento correctamente. Dentro de este grupo encontramos Inhaladores convencionales como: salbutamol, Beclometasona, atrovent (bromuro de ipratropio)
- Inhaladores de polvo seco (DPI): Los inhaladores DPI liberan el medicamento en forma de polvo seco (niebla fina) y generalmente no requieren coordinación con la inhalación. Se activan mediante una inspiración profunda. Dentro de este grupo encontramos; Tiotropio, spiriva.
- Inhaladores de cámara espaciadora: Estos inhaladores permiten que atravez de una inhalo cámara o cámara espaciadora, ayude a mejorar la administración del medicamento, especialmente para aquellos que tienen dificultades con la coordinación o la técnica de inhalación.
Técnica de uso adecuado:
Es fundamental utilizar los inhaladores correctamente para asegurar que el medicamento llegue a los pulmones de manera efectiva. A continuación, se presentan algunos pasos generales para un uso adecuado:
- Leer las instrucciones: Cada inhalador viene con un prospecto que proporciona instrucciones específicas. Es importante leerlo cuidadosamente y seguir las indicaciones del fabricante y/o del médico o terapeuta respiratorio el cual le va a informar una técnica adecuada para que presente mayor impactación del medicamento.
- Preparación del inhalador: Algunos inhaladores requieren preparación antes de la primera dosis o después de un período de inactividad. Esto puede incluir agitar el inhalador durante 15 segundos, o insertar una cápsula o cartucho de medicamento en el dispositivo.
- Postura adecuada: Mantener una postura erguida o ligeramente inclinada hacia adelante puede ayudar a facilitar la inhalación del medicamento.
- Respirar profundamente: Antes de inhalar, exhalar completamente para vaciar los pulmones. Luego, colocar el inhalador en la boca y, al presionar el dispositivo, inhalar lentamente y profundamente, llevando el medicamento a los pulmones.
- Retener la respiración: Después de inhalar, mantener la respiración durante unos segundos (según las indicaciones) para permitir que el medicamento se deposite en los pulmones.
Mantenimiento y limpieza:
Es esencial mantener los inhaladores en buen estado y limpiarlos regularmente para garantizar su eficacia y durabilidad. Algunos consejos para el mantenimiento y limpieza incluyen:
- Verificar la fecha de caducidad: Los inhaladores tienen una fecha de caducidad impresa en el envase. Es importante revisarla y reemplazar el inhalador cuando sea necesario.
- Limpieza regular: Lavar los inhaladores según las instrucciones del fabricante. Por lo general, implica enjuagar solo el dispositivo con agua tibia y dejarlo secar al aire.
- Almacenamiento adecuado: Guardar los inhaladores en un lugar fresco y seco, lejos de la humedad y el calor excesivo.
El manejo y uso adecuado de los inhaladores son fundamentales para garantizar un tratamiento efectivo de las enfermedades respiratorias. Seguir las instrucciones proporcionadas por médico o terapeuta respiratoria, así como mantener los inhaladores limpios y en buen estado, son pasos clave para maximizar los beneficios de estos dispositivos. Recuerda consultar a un profesional de la salud para obtener orientación específica sobre el uso de inhaladores y adaptarlo a tus necesidades individuales.